Hace escasamente dos días que volví de Israel. Allí me llevé varias sorpresas más que agradables. La primera respecto al idioma español. Y es que, nada más aterrizar en el aeropuerto nos hablaron en español. Con un innegable acento argentino. Un judío emigrado del país americano. Nada fuera de lo normal. Al fin y al cabo, Israel está lleno de inmigrantes de origen español, hispanofilipino o hispanoaméricano.
Llegamos al hotel y me dispongo a mostrar mi mejor inglés a la recepcionista. No hace falta, habla español. Nivel completamente nativo.
Salimos a la calle y nos perdemos. Preguntamos, en español: «¿Cómo se va a tal calle?» El israelí empieza a respondernos… ¡en español! Como veo que su nivel del idioma no es especialmente bueno, le contesto en inglés, a lo que replica:
No, no, háblame en español.
Con lo que seguimos nuestra conversación. Esto no ocurrió ni una ni dos veces, sino ¡cada vez que parábamos a un israelí por las calles! Misma escena: «háblame en español» en Tel Aviv, en el Mar Muerto, en Jerusalén…
¿Sabíais que en Israel hay ocho cadenas de televisión 24 horas en español con subtítulos en hebreo? Excluyo, naturalmente a TVE internacional, que no es para consumo israelí, claro. En los colegios israelíes, la segunda lengua extranjera es el español. De tal manera que cada israelí que termina su etapa escolar ha estudiado dos o tres años de español.
Nos encontramos con algunos casos realmente curiosos. En concreto, en el kibutz donde pasamos una de las noches, conocimos a un judío que hablaba hebreo, turco y español. De familia sefardí, sus ancestros abandonaron la península en el siglo XVI para emigrar a Turquía (por el decreto de expulsión de los judíos). Y posteriormente llegó a Israel. Pues bien ¡su familia había conservado el español desde el siglo XVI! ¡seis siglos! Lo hablaba perfectamente. Eso sí, con las normas de entonces. En realidad… era como hablar con un personaje del Quijote.
La universidad de Tel Aviv permite a sus alumnos examinarse en español. En Israel se publica prensa en español, se escucha música en español, siguen nuestra liga de fútbol en español… La mayoría de universitarios realiza estancias formativas en países de hispanoamérica. El español en Israel ha sido conservado y, hasta la fecha, es una de las lenguas maternas. Convive con las lenguas oficiales: el hebreo y el árabe.
Os invito a entrar en un restaurante de Tel Aviv donde no haya un cartel que diga «se habla español». En ningún viaje por el extranjero había hablado tanto español. Una experiencia sólo comparable a la de viajar a hispanoamerica. Toda una sorpresa, y un dato desconocido para los hispanohablantes.
Gracias, hermanos israelíes, porque en ningún momento nos sentimos extranjeros en vuestra casa.
Algunas noticias externas:
¡Vaya sorpresa! En Israel tambien hablan esta hermosa lengua que poseemos nosotros, agradable sin duda alguna.
Un saludo desde http://lunare.wordpress.com/ ojala pueda pasar a dejar un comentario en mi blog, gracias de antemano.
¡Qué ironía! En Israel se puede estudiar y hacer los exámenes en español, y en Cataluña (España) eso no es posible. En fin, que dan ganas de emigrar a Tierra Santa, ahí parecen más cuerdos que aquí…
El idioma castellano pierde terreno en su propia patria, es algo chistoso, si en españa dejaran de verse entre ellos como tribus el pais seria mucho mas prospero y fuerte, se la pierden hermanos.
[…] No, no, háblame en español […]
Elentir,,, lo que dices no es correcto,, pero bueno supongo que debes estar influeciando-a por lo que oyes y ves en algún tipo de prensa y no conoces la realidad…
Por lo demás,, lástima que en Filipinas no hayan seguido ni quieran seguir el mismo camino que Israel,, mejor les iría,, pero están demasiado gringo-lobotomizados para darse cuenta del caudál de riqueza histórica, patrimonial, cultural y personal que han perdido.
lo peor es que no solo el idioma español esta minusvalorado en Cataluña o regiones independentistas, sino que cada dia mas es desplazado en todo por el ingles el la cultura la música ya hasta ciudadanos ha dicho que lo quieren imponer bilingüe
España es un país esquizofrénico y apátrida
no nos gusta ni nuestra lengua considerada la mas bella del mundo